Ácidos

Posted by : Le poinçonneur | 5 mar 2009 | Published in

Escalofriante se me antoja la historia de Ameneh Bahrami, la mujer iraní a quien un salvaje desfiguró con ácido por no querer casarse con él. Esta querencia a los líquidos corrosivos presente en ciertos países no es más que una nueva manifestación del machismo en su variante más heavy: aquélla que cosifica a la mujer hasta reducirla a un objeto de cuya vida e integridad puede disponerse según convenga.

No menos terrorífica, sin embargo, aparece la respuesta de Bahrami, a instancias de quien, en los próximos días, se ejecutará la sentencia que, bajo la ley del Talión, un tribunal de su país acaba de dictar contra su agresor. Éste, por mandato judicial, recibirá veinte gotas del mismo ácido en sus ojos, de manos de la denunciante o de quien ella estime conveniente.

Ameneh vive, hoy día, en Barcelona, donde es sometida a tratamiento oftalmológico en una prestigiosa clínica, en parte sufragado por una ayuda del Gobierno español. Ayuda que, como mínimo, debería desaparecer, si se aplicaran al caso los mismos patrones que se siguen en relación a los inmigrantes que trasladan a sus hijas a sus Estados de origen para ablacionarles el clítoris.

Ante las peticiones de clemencia recibidas por parte de su compatriota Shirin Ebadi, abogada y Premio Nobel de la Paz 2003, Bahrami repone que no se preocupe tanto, porque al chico lo van a anestesiar y dicen que apenas se enterará cuando le caigan las gotas de ácido en sus ojos. La gran diferencia es que mientras que el vitriolo que la cegó cayó en nombre de la barbarie, ella, que niega actuar movida por la venganza, pretende aplicarlo en el de la justicia. Insólita ecuación.

(6) Comments

  1. parrulo said...

    Simplemente precisar que tengo entendido que a este hombre sólo le van a poner pocho uno de sus ojos, ya que, según la ley del lugar, el valor de una mujer es la mitad del de un hombre. Para dejarlo totalmente ciego parece ser que debía pagar un plus, como quien añade un alerón al coche.

    5 de marzo de 2009, 21:41
  2. Le poinçonneur said...

    Yerra Vd., mi querido Parrulo. Lea el último párrafo:

    http://www.elperiodico.com/default.asp?idpublicacio_PK=46&idioma=CAS&idnoticia_PK=592416&idseccio_PK=1007

    En uno o en los dos ojos, me sigue pareciendo una barbaridad.

    5 de marzo de 2009, 21:47
  3. parrulo said...

    Efectivamente tanto da uno que dos, pero si lee usted la misma noticia en el periódico de moda por aquí -última parte-, verá que se confirma aquello de que los periodistas estudian cinco años para aprender a leer y escribir y ni eso hacen bien xD

    http://www.lavozdegalicia.es/sociedad/2009/03/05/0003_7569326.htm

    5 de marzo de 2009, 22:00
  4. Le poinçonneur said...

    Parece que, como le quemó también la cara, el juez ha tenido a bien concederle el privilegio de dejarlo ciego de los dos ojos. ¡Albricias!

    6 de marzo de 2009, 2:59
  5. Catalina said...

    cada día me vuelvo más pesimista para con el mundo...

    7 de marzo de 2009, 18:12
  6. Le poinçonneur said...

    Tranquila. Ya sabes que siempre tenemos a mano a nuestro amigo el Conde de Caralt. Nunca falla.

    7 de marzo de 2009, 18:25