Lo que tienen Vdes. sobre estas líneas, es, como verán, un delicioso pubis femenino. Pelirrojo -ay-, para más señas. La instantánea pertenece a la última travesura de Oliviero Toscani: un calendario que el conocido fotógrafo ha realizado para Vera pelle, un consorcio transalpino de curtidores de pieles que juega a establecer una analogía entre la autenticidad de una vagina y la calidad de sus productos, a salvo de cualquier adulteración. Vera pelle, piel verdadera.
Como es natural, son muchos -muchas, básicamente: no nos engañemos- quienes, para regocijo toscánico, han puesto el grito en el cielo. Atenta contra la dignidad de la mujer, dicen unos. Reduce a las mujeres a sus partes íntimas, dicen otros. Imagino a Toscani leyendo estos titulares y sonriéndose acariciando a su gato. El tipo, vivido, nunca falla.
Desde aquí lo avento, solidario: la imagen superior retrata, sin duda, la fuente de la vida. La esencia, sí, no ya del sexo femenino, sino del mundo entero; bien vale, pues, toda alabanza.
Y no me extiendo más porque la lírica, mecachis, nunca habitó entre mis virtudes.
Mientras nos escandalizamos por estas cosas los verdaderos escándalos permanecen invisibles.
Saluds, Poinconneur.
COÑO!!!!, vaya coño, coñe.
Bonita foto.
*Eres una mujer sabia, Blue. Pero eso tú ya lo sabes :)
MUAS.
*xDDDD
Amén, Juse, amén.